Vive o invierte en una propiedad única ubicada en el corazón del Raval, en un entrañable edificio con seguridad recientemente reformado, a tres minutos caminando de Las Ramblas. La rentabilidad está asegurada. 

La vivienda en cuestión mide 110 metros cuadrados en total y está actualmente dividida (no segregada) en dos apartamentos completos e independientes que comparten luz, agua y gas. Cada apartamento tiene su propio acceso privado con llave y se distribuye en un dormitorio, cocina, sala de estar/comedor y baño completo.

Uno de los apartamentos, orientado al noroeste, da a la plaza Salvador Seguí, a través de dos ventanas y un gran ventanal con balcón. Cuenta con techos a unos cuatro metros, con lo que disfruta de luz todo el día y de sol directo por las tardes. El otro, orientado al sudeste, tiene luz todo el día y sol directo toda la mañana y mediodía a través de una enorme pared de cristal practicable que da a una terraza privada de uso exclusivo de 50 metros cuadrados amueblada con toldo retráctil. 

La terraza está en un patio interior de manzana absolutamente silencioso y mantiene los techos a más de cuatro metros con volta catalana.

Ambos apartamentos gozan de carpintería de aluminio con doble cristal acústico, aire acondicionado y bomba de calor por conductos en todas las habitaciones, calefacción de radiadores y agua caliente ilimitada por caldera de gas centralizada.

Actualmente, cada uno de ellos tiene un contrato de alquiler de larga temporada, por lo que la propiedad al completo está generando dos alquileres que conjuntamente suman 2150 € brutos al mes, o 25 800 € anuales. En una configuración de alquiler vacacional puro (de contratos mensuales, ya que el apartamento no tiene licencia turística) el bruto anual incrementa un 35 % hasta los 35 000 €, aproximadamente. 

A pesar de los contratos de largo plazo actuales, los apartamentos están diseñados para alquileres de temporada o vacacionales e incluyen en el precio de venta todo lo necesario para entrar a vivir inmediatamente: cubertería, ropa de cama, mobiliario, etc. Además, están separados por anchas paredes de piedra y fibra acústica en ambos lados, justamente para aislarlos. 

Cada uno de ellos tiene su llave privada y una cámara de seguridad en el pasillo interior que los une, con lo que sería posible alquilar un apartamento en régimen vacacional y otro a largo plazo, por ejemplo. La flexibilidad es total. El propietario ha alquilado la propiedad como un solo apartamento y como dos apartamentos independientes. Ha alquilado a largo plazo, por temporada y como apartamentos vacacionales. Ha tenido turistas, viajeros temporales y locales.

Los apartamentos se han diseñado como hogares de alto standing. El precio de venta incluye todos los muebles y objetos de decoración tal y como se ven en las fotografías, menos los cuadros. En concreto serían dos sofás cama (uno de ellos un Chesterfield original, importado de Inglaterra, de cuero rojo), dos camas dobles, dos mesas y sus sillas de comedor, y los muebles de terraza (sofás de exterior, alfombra, plantas y tumbonas de madera). Gracias a los sofás cama, cada apartamento tiene capacidad para 4 personas.

El precio de venta incluye también todos los electrodomésticos de ambos apartamentos, lo que supone dos grandes Smart TV para las salas y dos televisores secundarios para los dormitorios, dos neveras, dos fuegos a gas, dos hornos, dos microondas, dos lavadoras (una también es secadora) dos lavaplatos, caldera de gas, etc. Ambos apartamentos están también equipados con hervidores de agua, cafeteras Nespresso y planchas, entre otros pequeños electrodomésticos.

Pensada como un negocio, según el precio por metro cuadrado, el retorno sobre la inversión y la flexibilidad/adaptabilidad de usos de la propiedad es imbatible.